Privado, público y jocoso
El 30-9-11 la bailarina y vedette Cinthia Fernández, mientras realizaba una strep dance en el programa Showmacht de Marcelo Tinelli, se sacó la bombachita de la bikini y quedó “sin querer” con su genitalidad al aire. Enseguida, ella se puso la prendita mientras seguía saludando y contoneándose muy contenta, y listo el pollo (o la gallina pelada en este caso).
El suceso provocó un revuelo en cadena nacional de radio y TV, en la gráfica y en cadena internacional por internet. Todos los programas llamaban a Cinthia mientras repetían las grabaciones del hecho hasta el hartazgo, y la visión fugaz de su vagina pasaba a ser la imagen más reconocida en el mundo y sus alrededores, superando a la primera pisada del hombre en la Luna.
Los periodistas le preguntaban cómo había sucedido eso y si no había sido a propósito. Cinthia se mostraba encantada con semejante exposición, muy risueña y haciendo gala de una caradurez simpatiquísima. Explicaba que, en verdad, lo hizo sin darse cuenta porque -palabras más palabras menos- estaba en pedo: durante el baile le había caído vino en los ojos y estaba totalmente mareada. Insistía en que había sido “un accidente de esos normales que ocurren al bailar, como cuando se te sale una teta afuera por ejemplo”. Por fin, para ratificar sus dichos comentó muy suelta de cuerpo (valga literalmente la metáfora) que hace pocos días salió en la revista PlayBoy y que, aunque le ofrecieron la guita que quería por hacerlo totalmente en bolas, ella NO aceptó porque le daba “cosita”. Bueno... por ende… ¡ahora no iba a ser tan tonta de mostrar la vagina gratis!
Allá por 1986, en el programa de TV “Cordialmente” conducido por Juan Carlos Mareco, los invitados eran Jorge Don y el Polaco Goyeneche. Súbita e imprevistamente, el bailarín le encajó un beso en la boca al Polaco, y luego intentó justificarse con gran torpeza diciendo que su admiración por el cantor era tal que sentía como si lo amara. Los medios ardieron, otra vez en cadena nacional. Jorge Don entró en una crisis depresiva y se atrincheró dentro de su casa negándose a toda declaración. El Polaco, por su parte, intentó desdramatizar muy caballerosamente diciendo que a él no le había llamado la atención lo sucedido porque en el ambiente de tango los tangueros suelen besarse por costumbre. No sirvió de nada. Parecía que el pobre Jorge Don iba a terminar calcinado en la hoguera. Tampoco sirvió de mucho que Enrique Pinti dijese que lo que estaba sucediendo era una vergüenza absoluta y que en el fondo no éramos más que la Gran Aldea Colonial, prejuiciosa, pacata y mediocre.
Hoy, el mismo Pinti, refiriéndose al suceso nacional “Cinthia, su bombacha voladora y su vagina pública”, manifiesta declaraciones semejantes a las de entonces, deplorando lo sucedido y su trascendencia mediática, en tanto expresión de la mentalidad descontrolada y mediocre de la TV actual.
Querido Enrique: ¡No es la TV! ¡Tampoco es la economía! ¡Sigue siendo la Gran Aldea Colonial que cada vez más vertiginosamente avanza hacia atrás, al ritmo de canciones como “Cuidado con la bomba chita”!
Hoy, la genitalidad pública de Cinthia ya ha sido reemplazada por el casamiento de la duquesa de Alba y los primeros planos de su rostro de simio deformado por las cirugías. Así que habrá que esperar a mañana, a ver cómo contraataca Cinthia. Ella declaró hace pocos años que se había internado en un gimansio y que no iba a parar hasta que el culo le saliera de la garganta (una metáfora a lo Cinthia, claro). Hoy, dueña de un cuerpo menudo, armonioso, de trasero perfecto, adonde solo desentonan sus lolas gigantescas (la TV manda), dice que está luchando por recuperar su inversión con los mayores dividendos posibles y en el corto plazo que impone la biología.
No obstante, es innegable que esta bailarina tan joven y desenfadadamente graciosa, es mucho más agradable de ver que la anciana duquesa-sapo disfrazada de novia y bailando en patas… aunque las dos actúen con la misma descarada e impune desfachatez.
Marisa
1 comentario
Adela Montero -
Triste y divertida a la vez.
Cariños
Adela